La Coordinadora Sindical Palmera, la organización que coordina los sindicatos en el sector de la palma de aceite en Colombia, ha logrado resolver tres conflictos en los últimos seis meses.
Los sindicatos afectados por los abusos, la discriminación salarial y sindical fueron los compañeros de SINTRAPROACEITES, SINTRAINAGRO y SINTRAIMAGRA, donde se necesitó un apoyo inmediato para detener los ataques de las empresas. En un principio, los sindicatos intentaron resolver los problemas por sí mismos mediante un diálogo positivo y constructivo con la dirección. Querían evitar que la Coordinadora Sindical Palmera tuviera que intervenir para encontrar soluciones para los trabajadores de Hacienda La Gloria en Gloria Cesar, Palmas Oleaginosas de Santander (PALMOSAN) en Sabana de Torres Santander y Gradesa en Ciénaga Magdalena.
Paro laboral
Cuando las empresas se negaron a dialogar, apareció en escena la Coordinadora Sindical Palmera. Esta brindó apoyo, junto con los demás sindicatos de la Coordinadora, a través de la suspensión de actividades en las empresas, ejerciendo presión sobre los empleadores. De esta forma, el conflicto se resolvió finalmente. Los sindicatos y la Coordinadora forman una especie de alianza para unir fuerzas.
Situaciones inseguras en el lugar de trabajo
La sección de SINTRAPROACEITES en La Gloria se enfrentó repentinamente al despido de su presidente, Miguel Romero. Se le acusó de haberse presentado al trabajo bajo los efectos del alcohol. Todo estaba planeado, ya que Miguel había presentado unos días antes varias denuncias ante el Ministerio de Trabajo sobre condiciones inseguras en el lugar de trabajo, poniendo en riesgo la vida y la salud de los trabajadores de la planta de palma de aceite Hacienda La Gloria. Este despido ya ha sido revertido.
Errores insignificantes
La empresa Palmas Oleaginosas de Santander intentó debilitar a la sección de SINTRAINAGRO en Sabana de Torres, despidiendo a varios trabajadores por errores insignificantes. Después de cinco días de huelga, la empresa convocó a su administración para entablar un diálogo con el sindicato. Finalmente, los despidos fueron revertidos.
Acción política y huelga
La empresa Gradesa intentó manipular la negociación del convenio colectivo haciendo propuestas sin sentido, sin beneficios ni aumentos salariales con los que la sección de SINTRAIMAGRA en Ciénaga Magdalena pudiera estar de acuerdo. El sindicato no aceptó, y la empresa despidió a nueve líderes sindicales. Gracias al apoyo de todos los sindicatos de palma de aceite en Colombia y otras organizaciones sindicales, a través de acciones políticas y la suspensión del trabajo durante dos días, se logró ejercer una gran presión sobre la empresa y abrir un espacio de diálogo. Finalmente, los despidos fueron revertidos y las negociaciones del convenio colectivo se reanudaron de manera constructiva.
Red internacional
Mondiaal FNV e IPOWU también jugaron un papel en estos conflictos. Se enviaron cartas de protesta desde los Países Bajos a dos empresas. Esto causó un gran impacto. Gracias a su apoyo, se libraron batallas importantes y se alcanzaron grandes alianzas. Lograron que esas empresas, que nunca se habían comprometido con mejorar las condiciones de vida de los trabajadores en el sector de la palma de aceite, cedieran. El sindicato lucha por un mejor salario, mejores condiciones sociales y económicas, y una mejor calidad de vida para nuestras familias. Juntos, lo logramos.